Siguió girando, como en la fotografía. Siguió girando... a pesar de todo. A pesar de los augurios mayas.
Este año ha sido un año complicado, intenso, en lo bueno y en lo malo. Después de mi horroroso 2011 (os recuerdo que la última entrada del año pasado se llamaba "Que muera 2011") era fácil que las cosas fueran mejor.
Durante este 2012 las cosas, a nivel profesional, han sido difíciles... para mí y para muchos, para casi todos. Este gobierno asqueroso y repugnante y vomitivo no ha hecho más que empeorar la situación, el desempleo no ha parado de aumentar y la gente vive, en general, peor, soportando más cargas fiscales y más presiones en sus empleos, lo que ha enrarecido el ambiente de esta triste España mía. La gente anda más abatida, más enfadada. Pero tenemos que seguir adelante. Tenemos que buscar lo positivo y con sonrisas y manos blancas protestaremos para que nos dejen de robar de una vez por todas... y cuando digo robar no me refiero únicamente al dinero. Esta estafa de crisis terminará antes o después, pero lo importante es que cuando terminé no hayan destrozado todo y nuestras vidas sean peores para siempre... Por eso hay que seguir defendiendo lo que nuestros padres y nuestros abuelos lucharon tanto por conseguir. En 2012 he ido a más manifestaciones que en toda mi vida junta y mi interés por la política -no por los políticos, porque de eso hay pocos que merezcan la pena, por desgracia- ha aumentado, siendo más consciente que nunca de la importancia que tiene sobre nuestras vidas. Siendo consciente de la falsa democracia en la que vivimos. Porque la calidad de la democracia no es solamente votar de manera limpia, sino el respeto de los gobernantes por los ciudadanos y de eso no hay ni una pizca -la última prueba, hace solo unos días y el escandaloso apalabrados en la Asamblea-, la democracia es también el respeto por los derechos humanos, la libertad de la prensa o el compromiso con el desarrollo. Por todo esto, y por mucho más, vivimos en una pseudodemocracia. El sistema ha fallado y necesitamos uno nuevo.
A nivel personal ha habido de todo. Una pérdida importante en mi familia, un adiós que fue triste aunque, quizá, esperado. Y eso ya empaña un año que podría haber sido realmente bonito, incluso con las dificultades laborales. ¿Por qué? Por el maravilloso viaje a Ecuador, donde estuve colaborando con la Asociación de Mujeres Santa Marta, por La lágrima de la India que me está llenando el cuerpo de alegría y hermosas palabras, demostrándome una vez más la implicación de la gente (vosotros) cuando en un proyecto se pone el corazón entero, y esta vez me lo saqué del pecho y lo dejé entre las páginas de mi segunda novela, y por una tercera noticia maravillosa que marcará mi 2013, seguro.
Pero no sólo hablaré de mí, sino también de lo que ha latido en CAJÓN DE HISTORIAS. Allá va:
Literatura
Comenzó el año con la distinción a La casa de los espíritus como mi mejor lectura del año anterior. Un año que ha tenido como protagonistas a los escritores Rosa Montero, Haruki Murakami, Elvira Lindo y Antonio Skármeta, aunque de este último no haya tenido tiempo para reseñar las dos obras suyas que he leído: Los días del arcoíris y El cartero de Neruda, pero lo haré pronto. Prometido. A ellas, además, tuve la suerte de entrevistarlas, y eso no se olvida. Un año de muy buenas lecturas en general, en los próximos días os presentaré en otra entrada los libros que más me han marcado en 2012.
Música
Este 2012 falleció de manera inesperada Whitney Houston, una voz que resonará para siempre, porque I will always love you es un tema inolvidable. También tuvimos que despedirnos de Donna Summer, que fue protagonista de Junio en CAJÓN DE HISTORIAS como homenaje. El Festival de Eurovisión recuperó la dignidad perdida gracias a Pastora Soler y al triunfo de la sueca Loreen. De los españoles, sacaron disco Alejandro Sanz y Vanesa Martín... y Somebody that I used to know fue la canción que más sonó.
Cine
El 2012 empezó premiando a la nostalgia; The artist. Y en España, la Academia volvía a no rendirse a Almodóvar, aunque bien lo merecía, más que ningún otro a mi modo de ver. En CAJÓN DE HISTORIAS fue protagonista Clint Eastwood, más como homenaje por su trayectoria que por su útlima película, J.Edgar. También fue protagonista Stephen Daldry, uno de mis directores favoritos, y Marion Cotillard, que participó en la última de Batman y que ahora está en cartelera con De óxido y hueso, que estoy deseando ver. Ha sido un buen año de cine español, que ya empezó en el Festival de Málaga, al que tuve la suerte de asistir, y que se ha confirmado con los estrenos de Lo imposible, Blancanieves o El artista y la modelo, de Trueba.
Hasta aquí mi pequeño resumen del año. Quiero desearos una enorme sonrisa, quiero desearos sueños cumplidos... y lo que es más importante, quiero desearos que, aunque quizá no se cumplan siempre, no los abandonéis, sigáis ahí luchando por ellos, para que adquieran forma y se conviertan en realidad. ¡FELIZ 2013 DESDE CAJÓN DE HISTORIAS!