sábado, 28 de junio de 2014

RESEÑA | NO ME CUENTES TU VIDA, de Luis García Montero


No me cuentes tu vida es la última reseña que aparece en CAJÓN DE HISTORIAS durante este mes dedicado a Luis García Montero. Es una historia actual, de esta España nuestra, en la que se mezclan los acentos y los colores, y los sueños y los ideales lucen desgastados, y la crisis, la maldita crisis, está siempre presente.

Es la historia de Juan Montenegro, que decide escribir en unos cuadernos la historia de su vida, contarle su "visión de los hechos" a su hijo Ramón, de 23 años, que ha comenzado una relación sentimental con Mariana, la criada rumana de la familia. En el relato, como en la vida, caben alegrías y miserias, cabe el amor y la literatura.

Desde muy al principio he tenido la sensación de que el protagonista, Juan Montenegro, es un comunista del siglo XXI, uno de esos que lucharon contra la dictadura franquista con tanto fervor y que, con el tiempo, se han ido aburguesando, y ahora nos les queda más que un discurso leve, si no vacío. En sus entrañas sigue latiendo con fuerza esa implicación política y social, pero en las acciones la moderación resulta patente. La novela narra muy bien esa manera de pensar y de vivir, que a veces no casan del todo, aunque se esfuerce. Y el protagonista cae bien, es fácil entender sus razones, su vida. Hay algunos ejemplos muy representativos, eso sí, de esos actos o palabras tan opuestos a los que se predica, o a lo que dice pensar: cuando algún comunista le dice a su exmujer, comunista también, durante el proceso de divorcio, "sácale todo lo que puedas".

Alrededor de Juan hay otros personajes: Ana, la suegra, una mujer brillante, activa; Lola, la esposa intelgente, que es el amor vivo y a la vez sereno; Ramón y Mariana, que son ideológicamente flojos, "tu hijo vota al PSOE", se dice en algún momento del libro, y especialmente pasivos, atolondrados por una sociedad a la que llegó una crisis inesperada y dejó paralizados a tantos jóvenes. Y también otros dos personajes, muy bien perfilados: Andrés Martín, el pintor amigo íntimo de la familia; y Pedro Alfonso, un poeta ya fallecido sobre el que Juan está escribiendo una novela. En la vida de ese poeta reconocemos a Rafael Alberti, que vivió en el exilio, que murió siendo comunista. También están las historias pequeñas del principio de la segunda parte de la novela, que guardan las páginas más brillantes de la novela con la historia de Felicia y de los vecinos bolivianos, de Rurrenabaque, un lugar maravilloso y verde en el que, por cierto estuve el año pasado, y de su hijo, que nació en Móstoles, como yo. Esas páginas se me han quedado en el corazón y me han emocionado. Y al, final, como un regalo del autor, Luminita, la abuela rumana de Mariana, un personaje brillante que es la dignidad y la demostración de que las cosas siempre depende de los ojos con los que se miren. Luminita que se mantiene fiel a una forma de pensar, de vivir, y siempre crítica con dignidad. 

La novela, publicada por la Editorial Planeta (¿por qué la editaría Planeta si Luis García Montero ha publicado siempre con Alfaguara? ¿Se presentaría quizás al Premio Planeta?), me ha gustado porque refleja muy bien el cambio generacional de España y, a la vez, porque es un canto de amor de un padre a un hijo, y eso es algo que no abunda tanto en la literatura.

Pero sobre todo, me ha gustado porque es una fotografía de un país al que le estalló una crisis económica, política y social en la cara. Y cómo eso, a pesar de tantas cosas malas, como los comentarios racistas que se escuchan de vez en cuando entre los ignorantes, a veces incluso entre los propios inmigrantes, ha servido, está sirviendo para despertar de un aletargamiento y promover un cambio necesario. Una lectura muy recomendable. 

Las frases:
La libertad es otra mentira más, una confusión, igual que la democracia. 

El capitalismo ha vencido porque es más hijo de puta que el comunismo.

Aquí se repite mucho que el pueblo es paciente, estoico, que se toma cualquier desastre con paciencia. No es verdad, aquello no era paciencia. Prefiero llamar a las cosas por su nombre. Era humillación, una penumbra mural, un miedo convertido en mediocridad, en incapacidad para vivir al margen de la corriente. Pero de pronto todo estalló y confié en volver a respirar bajo un color distinto.

Texto: Ismael Cruceta

miércoles, 25 de junio de 2014

RESEÑA | EN LA ORILLA, de Rafael Chirbes



Con esta novela, el escritor Rafael Chirbes ha ganado el Premio de la Crítica de Narrativa Castellana 2013. Es la segunda vez que lo recibe, tras alzarse con él en 2007 por Crematorio. 

En la orilla es el retrato novelado de una crisis, mucho más que de la crisis económica, más bien de una crisis social y de valores, unida por supuesto a esa parte de crisis económica y profunda crisis, también, política. Es la historia de un hombre gris que ha desperdiciado su vida, al que nada le queda ya porque nada tuvo. O quizá creyó que durante un tiempo algo tenía, pero era ficticio, un espejismo líquido.
 
A pesar de ese premio, reconozco que hay demasiadas cosas en esta novela que no me han terminado de convencer. Al principio, hay una constante y reiterada confusión entre "emigrante" e "inmigrante". No he visto nada al respecto en otras reseñas, pero cuando leí esta novela (en diciembre de 2013) tuve la certeza de que el autor no distinguía bien entre ambos términos. Medio año después, por fin, me siento a escribir esta reseña, recuperando aquellas notas de entonces y me sorprende, la verdad, que nadie haya escrito nada a este respecto. Abro la novela y lo compruebo. Efectivamente, en la página 14 de mi edición (Círculo de lectores), leo: muchos de los emigrantes viven del subsidio de desempleo. Cuando lo que debería poner es "inmigrantes", porque esas personas extranjeras están instaladas en España y el subsidio de desempleo al que hace referencia es el del sistema español. 

Claro, empezamos mal. Y se me queda ese regusto imperdonable durante toda la lectura. Obviamente, Chirbes escribe muy bien, realiza un gran trabajo en su novela, pero En la orilla es una novela gris que no consigue despertar en mí un sentimiento de empatía con ese protagonista que vuelca su amargura en un vómito de sensaciones negras. 

Es una novela cruda, sin luz, sin esperanza y que no consigue, en ningún momento, removerme las entrañas. 

Y por eso, aunque narrada con pulso firme y con valentía, no seré yo quién la recomiende. Y eso que tiene frases demoledoras que me han gustado mucho y algunas pequeñas historias intercaladas muy brillantes, pero la sensación global no ha terminado de ser satisfactoria. Llamadme osado por ir en contra de un Premio de la Crítica, pero es lo que hay. 

¿Os influyen los premios literarios a la hora de elegir lectura? A mí, algunos sí (el Nobel, el Príncipe de Asturias, el Cervantes, el de la Crítica, el Nadal más antes que ahora...) pero esta vez me he equivocado. 

La frases:

Le pasa a mucha gente: cree que vive una situación provisional y lo que está es simplemente viviendo su vida, la que le ha caído o la que se ha buscado.

Hay mucho medieval franquista enquistado en este puto país.

La gente está muy ligera para pedir responsabilidades a los demás, tiene mucha desenvoltura para marcar las obligaciones ajenas y se muestra muy poco dispuesta a asumir las propias, ni siquiera dispuesta a hacer favores está. 

Me parece que la historia es mentira, pero que la tristeza es verdad. 

Texto: Ismael Cruceta @CajondeHistoria

domingo, 22 de junio de 2014

TOP 10 | Canciones dedicadas a Madrid


En realidad he hecho trampas, porque este Top 10 contiene, en total, 14 canciones. Pero es que hay artistas que han cantado tanto a Madrid que me resultaba imposible escoger solamente uno de sus temas. Ahí va una selección de canciones en las que Madrid, mi ciudad, está presente.

10. Vanesa Martín: Nadie más que tú
Una de las canciones de la malagueña que crea un sentimiento especial en el que la escucha, por su melodía que se disfruta... Una canción sobre las historias de amor que, a veces, no pueden ser... Ya refresca por la tarde aquí en Madrid... Tú tenías tu vida, yo mi razón... 

9.  Medina Azahara: Así es Madrid
Voy caminando por las calles de Madrid, voy recordando los momentos junto a ti, los que vivimos, los que quedan por vivir. Un grupo mítico de la música  rock española, que también ha cantado a Madrid.

8. Alejandro Sanz: Mi soledad y yo 
Esta antigua y popular canción de Alejandro Sanz que cantaron las quinceañeras en los años 90 cuenta la historia de una relación truncada por la distancia. En Madrid está lloviendo y todo sigue como siempre, solamente que no estás y el tiempo pasa lentamente... 


7. La Fuga: Madrid 
Otro grupo de rock en esta lista. El Madrid al que canta La Fuga es una ciudad grande y a veces gris que puede resultar hostil. A pesar de esa tristeza que evoca el tema, es una canción preciosa. Y la tristeza es un sentimiento digno y emocionante.


6. Shakira: Te dejo Madrid
La colombiana cantaba en esta canción a Madrid, una ciudad de la que, a veces, es necesario marcharse para volver con unas ganas renovadas. Para volver siempre. Ahí me voy otra vez, ahí te dejo Madrid, tus rutinas de piel, tus ganas de huir...


5. La Oreja de Van Gogh: Puedes contar conmigo
El grupo donostiarra hacía, con este tema, un canto a la amistad posible, al amor que acabó pero del que rescatar lo hermoso. Os confieso que es una de mis canciones favoritas de la banda. Y hoy solo quiero creer que recordarás las tardes de invierno por Madrid, las noches enteras sin dormir, la vida pasaba y yo sentía que me iba a morir de amor al verte esperando en mi portal, sentado en el suelo sin pensar que puedes contar conmigo.


4. Ismael Serrano: Kilómetro cero + Vuelvo a Madrid 
Kilómetro cero es una poesía, de principio a fin. Madrid es habitado como mi colchón... Una tema sobre la vida en la ciudad, contada con certera precisión, sobre la soledad y la multitud. Y también una manera de agradecer a la vida precisamente eso, estar vivos.


Vuelvo a Madrid es ese sentimiento que se tiene al regresar, el pequeño estremecimiento en el estómago cuando se sobrevuela la ciudad, con sus luces y sus sombras. Vuelvo a Madrid es un canto de amor a la ciudad, a su historia, a su ambiente multicultural, a sus ganas de pelear por lograr un lugar mejor donde vivir, a pesar de algunos malos gestores que enarbolan banderas pero empobrecen una ciudad... Soy afortunado, yo siempre vuelvo a Madrid... ciudad de mis noches, del viento del pueblo, de la resistencia, del "No pasarán"... Maldita ciudad no es tu mejor momento y aún estás hermosa... he de confesarte que te eché de menos. Agarro la guitarra y canto para ti... qué bueno estar en casa... vuelvo a Madrid.

3. Mecano: No hay marcha en Nueva York + Quédate en Madrid
Tantas veces ha cantado Mecano a Madrid que me ha costado elegir solo dos de sus canciones. Pero me quedo con una canción con ese tono cómico que tienen alguna de las canciones del grupo, de aquí, de Madrid, que habla sobre un viaje a Nueva York, y bueno, al final, sale a relucir ese sentimiento que tenemos todos cuando estamos fuera, que sentí el año pasado en un concierto tributo que hicieron a Mecano en La Paz: estoy loco por irme a Madrid.

La otra canción que he escogido del grupo es la de su vertiente más triste, capaz de definir esos sentimientos pequeños que hacen vibrar el corazón. Quédate en Madrid es la rendición al amor. Preciosa.



2. Ana Belén: A la sombra de un león + Peces de Ciudad 
¡Qué cosas! Las dos canciones que he elegido de Ana Belén, que son puro amor por Madrid, las ha compuesto Joaquín Sabina. La primera, A la sombra de un león es Madrid de principio a fin. Gracias por haber venido a abrigarme el corazón. 


Y luego Peces de ciudad, mi favorita de la cantante. Cargada de tantas bellas imágenes, Peces de ciudad es supervivencia en un tiempo hostil con sueños rotos y heridas sobre la piel, y ciudades guardadas en el corazón, para siempre, porque en ellas fuiste feliz, guardadas para siempre, por mucho que pase el tiempo. Cuando en vuelo regular surqué el cielo de Madrid me esperaban dos pies en el suelo que no se acordaban de mí...



1. Joaquín Sabina: Pongamos que hablo de Madrid + Yo me bajo en Atocha
Allá donde se cruzan los caminos, donde el mar no se puede concebir, donde regresa siempre el fugitivo, pongamos que hablo de Madrid. Porque a veces me canso y reniego de este ritmo loco y agotador. Pero se puede querer a un lugar y quererlo, por eso, más justo, más democrático, más comprometido. Y ese sentimiento de pertenencia a un lugar se mantiene esté donde esté, porque yo soy de aquí, de Madrid.


Y para acabar esta lista de canciones, Yo me bajo en Atocha. La letra lo dice todo:
Con su boina calada, con sus guantes de seda,
su sirena varada, sus fiestas de guardar,
su vuelva usted mañana, su sálvese quien pueda,
su partidita de mus, su fulanita de tal.

Con su todo es ahora, con su nada es eterno,
con su rap y su chotis, con su okupa y su skin,
aunque muera el verano y tenga prisa el invierno
la primavera sabe que la espero en Madrid.

Con su otoño Velázquez, con su Torre Picasso,
su santo y su torero, mi Atleti, su Borbón,
sus gordas de Botero, sus hoteles de paso,
su taleguito de hash, sus abuelitos al sol.

Con su hoguera de nieve, su verbena y su duelo,
su dieciocho de julio, mi
 catorce de abril.

A mitad de camino entre el infierno y el cielo
yo me bajo en Atocha, yo me quedo en Madrid.

Aunque la noche delire como un pájaro en llamas,
aunque no dé a la gloria la Puerta de Alcalá,
aunque la maja desnuda cobre quince y la cama,
aunque la maja vestida no se deje besar,

Pasarelas Cibeles, cárcel de Yeserías,
Puente de los Franceses, tascas de Chamberí,
ya no sueña aquel niño que soñó que escribía,
Corazón de María, no me dejes así.

Corte de los Milagros, Virgen de la Almudena,
chabolas de uralita, Palacio de Cristal,
con su "no pasarán" con sus "vivan las cadenas",
su cementerio civil, su banda municipal.

He llorado en Venecia, me he perdido en Manhattan,
he crecido en La Habana, he sido un paria en París,
México me atormenta, Buenos Aires me mata,
pero siempre hay un tren que desemboca en Madrid,
pero siempre hay un niño que envejece en Madrid,
pero siempre hay un coche que derrapa en Madrid,
pero siempre hay un fuego que se enciende en Madrid,
pero siempre hay un barco que naufraga en Madrid,
pero siempre hay un sueño que despierta en Madrid,
pero siempre hay un vuelo de regreso a Madrid.


Y a ti, ¿qué canción sobre Madrid te gusta más?

Texto: Ismael Cruceta @CajondeHistoria

viernes, 20 de junio de 2014

CORTOMETRAJE | BIKINI, de Óscar Bernàcer


BIKINI es un cortometraje (17 minutos) sobre la reunión que mantuvo el alcalde de Benidorm, Pedro Zaragoza, con Franco y Carmen Polo para conseguir que se permitiera el uso del bikini en las playas españolas.

Tras unos primeros instantes pausados, la acción comienza cuando entran en escena Carlos Areces y Rosario Pardo, interpretando al dictador y su esposa. Una imagen desternillante. BIKINI destaca por su producción cuidada y, sobre todo, por su guión, con esa conversación sobre motocicletas que no tiene desperdicio.

En apenas cuarto de hora, el director Óscar Bernàcer logra dibujar con maestría una caricatura de sus personajes: una Carmen Polo preocupada por la estética, la superficialidad y la farándula. Y un dictador obsesionado con la economía, torpe, paranoico, pero calmado, y sabiendo que quién realmente toma las decisiones, en determinados asuntos las toma ella.

BIKINI es un cortometraje estéticamente elegante, con una sutil ironía y con un punto álgido con la exposición del alcalde (interpretado por Sergio Caballero) sobre las glorias del uso de esa prenda femenina, mientras Carmen entra en cólera y Franco está tan perdido y alejado de la realidad que hay que explicarle cuánto cubre el dos piezas.

Desde CAJÓN DE HISTORIAS os recomiendo que veáis esta película y, una vez más, reclamo un circuito más accesible para los cortometrajes, que muchas veces entrañan un ejercicio de concisión y arte en estado puro que merece la pena tener en cuenta y hacer llegar al público de manera masiva.




Texto: Ismael Cruceta @CajondeHistoria

Más cortometrajes en CAJÓN DE HISTORIAS:

- Café?, de Antonio Godino
- Por tu bien, de Icíar Bollaín
- La dama y la muerte, de Javier Recio
- Bastille, de Isabel Coixet
- Faubourg Saint-Denis, de Tom Tykwer

martes, 17 de junio de 2014

RESEÑA | ALGUIEN DICE TU NOMBRE, de Luis García Montero


Con un inicio brillante, la nueva novela de Luis García Montero, protagonista del mes en CAJÓN DE HISTORIAS, es, en palabras de su autor, "una declaración de amor a la vida y a la literatura". Alguien dice tu nombre es la historia de León Egea, del verano de sus 20 años que cambiaría su vida, del tiempo en el que se quebraría la barrera que separa la niñez de la edad adulta, pero con el tiento necesario que dan la experiencias vitales. 

Alguien dice tu nombre es una novela hermosa, escrita con la sonoridad de una poesía y con la agilidad calmada de la mejor novela. Son tres personajes brillantes, delicados, perfectamente dibujados a los que se quiere por igual. León, el narrador, perdido en un amor que se le ha insertado en la boca del estómago y le sube y le baja, a veces dulce y otras cargado de angustia, con profunda pasión en todo caso, como es el amor a los 20 años. Y más para un alma sensible como la suya, dispuesto a ser escritor, a comprometerse con la vida, a hacer cambiar a través de las letras esa España de 1963 detenida en el tiempo. Junto a él, dos compañeros de trabajo: Vicente Anodino. Y lo pongo con mayúscula no porque sea su apellido, sino porque es el rasgo de su carácter más marcado. Y con todo, le admiras, porque sabes que sabe, que calla más de lo que cuenta, que su baza es su silencio. Y luego Consuelo, que es madurez y sensualidad y sabiduría y perspicacia. Un polisídenton en contraposición a los numerosos asíndeton que tanto le gustan al narrador, al escritor. León es capaz de describir con precisión certera a los personajes, sabe mirarlos, no se limita a verlos. Y además de ellos tres no se puede dejar de mencionar a otro personaje que no está, porque está de vacaciones, y sin embargo, sí está, siempre: el profesor de Literatura. Dice mi profesor de Literatura que el peligro más grave de un poeta es la cursilería. Detrás de un cursi siempre hay un impostor.


En la 73ª Feria del Libro de Madrid
Alguien dice tu nombre es una novela hermosa, reitero, y también madura. Y un ejercicio literario cargado de ternura, de amor por el lenguaje, por ese derroche de descripciones en cada una de las ventas de enciclopedias de la editorial Universo que realizan los personajes en la provincia de Granada durante aquel verano de 1963, y también entre las paredes de un piso alquilado como preparación para las futuras ventas, como si prepararse ese mecanismo de trabajo fuera una manera de preparase para la vida: león, mamífero carnívoro, leopardo, también muy fiero, Luis de Góngora o Fray Luis de León, y León Tolstoi, por supuesto, y papas con el nombre de León y reinas con el nombre de Leonor, y hasta Lenin, y luego Lesoto o Letonia o Líbano, va explicando el protagonista con locuacidad. 

Alguien dice tu nombre es el recuerdo de otra España que parece tan lejana y no... Es la dignidad y el pudor, y el miedo latente de un padre con la cabeza agachada, y la gallardía de un niñato que no sabe nada de la vida y eso le hace entrañable y limpio. Y es el amor primero, el que queda pegado a la piel, eterno aunque muera, porque muere seguro y muere siempre.

Alguien dice tu nombre es una novela sobre la vida, en la que a veces se pierde. Se pierde la niñez y se rompen algunos sueños. No se puede ganar siempre. Pero otras se gana, quizás, porque como se avisa en cierto momento, nos espera una sorpresa final. Una sorpresa necesaria para que funcione la novela y la vida. Maravillosa sorpresa. Maravillosa novela. Maravillosa vida. 

El autor firmando mi ejemplar.
Una recomendación:
Leed la página 116 en voz alta. Especialmente desde donde empieza: Puedo hundirme en una novela rusa, disponer de la estepa, de una batalla, de una historia de amor, pero la cárcel sigue conmigo. Leed ese párrafo una y otra vez hasta que recordéis cada palabra de esa poesía que no parece tal. 


La frase:
La cultura es la columna vertebral de un pueblo. La cultura es tan importante como el pan, alimenta nuestras ideas, nuestro sentido del deber, nuestro compromiso. Un país sin cultura es una selva, una tierra sin honor. 


Texto: Ismael Cruceta @CajondeHistoria

viernes, 13 de junio de 2014

RESEÑA | HABITACIONES SEPARADAS, de Luis García Montero


Este poemario de Luis García Montero, protagonista del mes en CAJÓN DE HISTORIAS, ganaba, hace ahora dos décadas, el Premio Nacional de Poesía. Era 1994, yo tenía 7 años, "casi 8" diría seguramente, y miraba la vida con ojos de niño. Felipe González estiraba un mandato decadente. Nelson Mandela ganaba las primeras elecciones multirraciales en Sudáfrica. El infierno estaba en Sarajevo, en Bosnia. Y el mundo se quedaba sin Charles Bukowski. 

Habitaciones separadas está dividido en cinco partes. 

La primera es Las razones del viajero. El inicio de un viaje de soledad y libertad, dos palabras que suelen apoyarse en los hombros heridos del viajero. Y de uno de los versos de esas razones expuestas, toma el título de la segunda parte: En otra edad, que es melancolía y nostalgia mezcladas, que es una bofetada de lluvia al final de un verano, que es recuerdo y consciencia del paso del tiempo.

En Habitaciones separadas está Nuestra noche, que tiene algunos endecasílabos con ecos de Neruda. Uno de mis favoritos:

Quisiera perseguir algún poema
que hablase de mis noches, nuestra noche, 
la misma noche cálida de rostros conocidos,
en el mismo rincón, ya no hace falta
preguntar lo que bebe cada uno.

(...)

Escribir, por ejemplo, son ahora
mucho menos frecuentes estas noches, 
y recuerdan inviernos negociados
con renta de amistad,
y tienen algo
de temblor fugitivo.
Las caras han cambiado, saben cosas
y se parecen más a nuestras vidas. 

Luis García Montero es preciso para definir los sentimientos imprecisos, las pasiones marchitas por el paso del tiempo. Y es un poeta del suyo, de su tiempo, de ese tiempo que era 1994, tan lejano, tan diferente en algunas cosas y tan perenne siempre en otras... jóvenes que aprendieron la impertinencia de la seducción en modas y países diferentes, ejecutivos de provincias... 

Habitaciones separadas es un libro de hoteles y aviones. Y de amores desdibujados y cargados de música. 

Aunque tú no lo sepas te inventaba conmigo,
hicimos mil proyectos, paseamos
por todas las ciudades que te gustan,
recordamos canciones, elegimos renuncias,
aprendiendo los dos a convivir
entre la realidad y el pensamiento.

Y casi en un suspiro llegamos a En otro tiempo, que es la parte más profunda del poemario. Versos que no ocultan un resquemor amargo, un sueño que rompieron y que hay que construir, despacio, como un puzzle. Versos que dejan un regusto de derrota. 

Porque sé que los sueños se corrompen
he dejado los sueños, 
pero cierro los ojos y el mar sigue moviéndose
y con él mi deseo
y puedo imaginarme 
mi libertad, las costas del Cantábrico,
los pasos que se alargan en la playa
o la conversación de dos amigos.

Buscad este libro una tarde entre las estanterías de alguna librería, de alguna biblioteca. Leedlo en voz alta. Y guardarlo siempre. 

Texto: Ismael Cruceta @CajondeHistoria

miércoles, 11 de junio de 2014

RESEÑA | LOS ÚLTIMOS DÍAS DEL IMPERIO CELESTE, de David Yagüe


Los últimos días del Imperio Celeste es la segunda novela de David Yagüe. Una novela de aventuras ambientada en China en 1900, cuando se gestó y eclosionó la rebelión de los bóxer, un grupo organizado que quería evitar la injerencia política y social de las potencias extranjeras, especialmente europeas, en el país asiático.

Es una novela coral en la que los protagonistas son, en su mayoría, expatriados en China, como el español Ramón Álvarez, un buscavidas; Paul Kelly, un comerciante; o el misionero británico James Liddle. El libro narra las vicisitudes en las que se ven envueltos algunos personajes tras la desaparición de una antigüedad de enorme valor. Y por otro lado, funciona como un interesante documento para acercarse a la historia del gigante asiático.

Es un libro muy dinámico, que va concatenando las acciones para atrapar al lector. Una de las cosas que más me ha gustado es cómo se explica el conflicto que va generándose entre chinos y extranjeros, y que finalmente estalló dejando un gran número de muertos, y lo que es más importante, sentando las bases de lo que sería la caída definitiva de la dinastía Qing, que tuvo lugar en 1911. Yagüe es capaz de narrar los sucesos desde diferentes ópticas, permitiendo al lector que conforme su propia imagen de los porqués de esta rebelión que marcaría definitivamente la historia de China hasta nuestros días.

He echado en falta, sin embargo, que hubiera un protagonista absoluto. Un personaje perfilado con más precisión que se convirtiera en el eje de la acción. Al principio, parece que será Ramón Álvarez, pero finalmente este cede el protagonismo, siendo la novela puramente coral, lo que, a mi modo de ver, le resta fuerza, porque el lector no termina de implicarse del todo con un personaje, acompañarle de principio a fin en su dicha o en su desgracia, aunque alguno de ellos tienen destellos de brillantez, como el de Sarah Liddle, o los mencionados antes. 

David Yagüe demuestra su buen hacer a la hora de narrar acontecimientos cargados de acción, de hacerlo con una técnica muy visual y cinematográfica, lo que facilita la lectura e introduce al lector en el libro. Por el contrario, hay un par de momentos melodramáticos en los que no se logra crear el drama necesario que conmueve o emociona. 

Los últimos días del Imperio Celeste es una novela de aventuras muy recomendable para todos aquellos interesados en la Historia Universal, también para los amantes de la novela histórica y una oportunidad para el público, especialmente el juvenil, de acercarse a estos acontecimientos contados con pasión. Un libro que merece la pena recomendar hoy porque en él hallamos un autor inteligente que es capaz de entretener de principio a fin.

Texto: Ismael Cruceta @CajondeHistoria
Imagen del autor tomada de su página web

lunes, 9 de junio de 2014

LA LÁGRIMA DE LA INDIA en la Feria del Libro de Madrid


Otro sueño cumplido. El pasado viernes 6 de junio estuve firmando ejemplares de La lágrima de la India en la 73ª edición de la Feria del Libro de Madrid. Mi primera vez. 

Fue una preciosa experiencia, porque en El Retiro, entre tantos libros y tanta gente, desaparecen los nervios y las tensiones propias de las presentaciones. La feria es un espacio para compartir y celebrar el amor por la literatura, para charlar, para acortar distancias entre escritores y lectores, para ver de cerca a aquellos escritores que nos han hecho volar, para saber cuáles son las tendencias en el mundo editorial, para que más gente se acerque a tu obra, a, en este caso, mi novela, que tantas alegrías me ha dado. 

Quiero dar las gracias a todos y todas los que estuvisteis acompañándome en El Retiro, a los que comprasteis esta novela de amistad, de destinos y verdades, y de sonrisas. Muchísimas gracias por vuestros cariño y por vuestro apoyo. Me hizo mucha ilusión volver a ver a Manuela, de Entre mis libros y yo, y también a Víctor Alfaro, locutor de Radio Sol XXI y autor de Alejandro y la gorra del tiempo, con el que compartí tardes en el estudio de la Calle San Bernardo durante unas semanas.  También a todos los que habéis hecho difusión de este encuentro en redes sociales, que habéis sido tantos que me da apuro poner nombres porque sé que me voy a olvidar de alguno.Para todos aquellos que vais a pasar en esta última semana por la feria, os recuerdo que podéis haceros con vuestro ejemplar en la caseta 305, la de Entrelíneas Editores. 

Además, quiero compartir esta entrevista que me hizo la periodista Natalia Pulido, una de mis grandes amigas y de mis grandes apoyos en esta aventura literaria. Una entrevista preciosa para Villaviciosadigital.es que os invito a leer y a dar a me gusta. Además, sortean un ejemplar dedicado de La lágrima de la India entre todos aquellos seguidores de este medio de comunicación en Facebook o Twitter que compartan la entrevista de manera pública. ¡Suerte!

Texto: Ismael Cruceta @CajondeHistoria
Fotografías: Natalia Pulido 


miércoles, 4 de junio de 2014

Mis canciones del mes de Junio


10. Conchita Wurst: Rise like a phoenix (N)
Para los que no lo sepáis, o para los que no hayáis escuchado el tema, esta es la canción ganadora del último Festival de Eurovisión. Conchita Wurst es el personaje que ha creado Thomas Neuwirth: una mujer barbuda que le ha funcionado muy bien y que ha dado mucho que hablar. Causa un impacto visual indiscutible, eso está claro, aunque como artista, parece que tiene los días contados ¿qué opináis? La canción: una balada pop estilo James Bond, que está bien aunque tampoco es para tirar cohetes... ¿qué os parece?


9. Coldplay: Magic (-2)
El primer single del nuevo álbum de Coldplay es una canción de calidad, sugerente, que se queda dentro. Merece la pena escucharla.


8. Rozalén: Saltan chispas (N)
Nuevo videoclip de Rozalén, a la que elegisteis como Mejor Artista Revelación de 2013. Un video animado que es todo dulzura. Y uno de mis temas favoritos de su primer álbum. Saltan chispas es una invocación a la alegría, a la positividad, a luchar por aquello que deseamos, porque sí, porque a veces los sueños se cumplen. Que se vuele el miedo que come por dentro todas las ilusiones que tengo, que salgan arrugas en las comisuras de tanto reír, que vuelvan a verme buenas vibraciones que repitan que todo irá bien, que me eches de menos, que la vida me quiera bien...

7. Mayte Martín: Por la mar chica del puerto (-1)
Hay poesías que se cantan, y formas de cantar que son poesía. Este tema, con ese arpegio en la guitarra tan precioso, es ambas cosas. Por la mar chica del puerto es un lamento en la voz y en las palabras. Imprescindible. A la sombra de una barca me quiero tumbar un día y echarme todo a la espalda y soñar con la alegría...


6. Shakira: Dare (La la la) (N)
El nuevo single de Shakira es la canción del Mundial del Fútbol de Brasil, así que imagino que nos vamos a cansar de escucharla a lo largo de este mes. Shakira repite en esto de poner música a este campeonato, pero esta vez está más que justificado: es un ícono de la música latinoamericana actual. Al menos a mí me lo parece.


5. Mariah Carey: Thirsty (N)
Por fin salió a la venta, cinco años después del anterior, el nuevo álbum de Mariah Carey. Thirsty es una pegadiza canción RnB que recuerda a los mejores temas de The emancipation of Mimi.



4. Sia: Chandelier (N)
Con este fantástico videoclip se presenta el nuevo tema de Sia, una de las cantantes que más nos gustan en CAJÓN DE HISTORIAS, por la cantidad de matices y lo especial de su voz, que es capaz de transmitir tantísimas cosas. Chandelier es un temazo. TE-MA-ZO.


3. Calle 13 y Silvio Rodríguez: Ojos de color sol (N)
Cuando se juntan los más grandes de la música latinoamericana esto es lo que ocurre: una maravilla. Calle 13 explota su lado más tierno y, acompañado del mítico Silvio Rodríguez, nos regala este tema que colorea la imaginación con colores, y huele a hierba verde. Ojos de color sol es una delicia, dulce. Como el amor primero.


2. Malú con Miguel Poveda: Ángel caído (N)
En uno de los últimos conciertos que ofreció Malú en el Palacio de los Deportes de Madrid, uno de los artistas invitados fue Miguel Poveda, con quien cantó esta canción. El tema comienza en el minuto 2:20, pero he querido poner este vídeo en concreto por la calidad del sonido y de la imagen, muy buena teniendo en cuenta que está grabado con una cámara no profesional. Ángel caído es uno de los temas más bonitos del álbum , y la interpretación de ambos pone los pelos de punta, porque Poveda en cada nota es capaz de hacer llorar de pura emoción, de puro arte.


1. Amaral: Ratonera (+1)
Amaral consigue su primer Número 1 en CAJÓN DE HISTORIAS con Ratonera, el adelanto de su próximo álbum. Una canción dedicada a la clase política corrupta, ladrona, que ha destruido tantos sueños con este maldito sistema capitalista. Pero no renunciaremos fácilmente a ellos, a los sueños, y saldremos a buscarlos donde sea. Puedes intentar que te perdone dios, no lo haré yo, canta Amaral. Número 1 este mes de Junio en el que las cosas parece que comienzan a cambiar, en el que los dos "grandes" partidos de España han visto como no gozaban por primera vez del favor de la mayoría de los electores. Tiembla, tiembla, que tú final se acerca. Unos días en los que las banderas republicanas han ondeado en tantas ciudades, pidiendo, sobre todo, el derecho a decir que se nos niega. Ahora toca seguir peleando por lo que es nuestro, por lo que nos han robado. No sé cómo duermes por las noches, estúpido farsante, si mientes más que hablas. Un temazo. Un digno Número 1.

domingo, 1 de junio de 2014

Protagonista del mes... Luis García Montero


Han pasado las leyes del honor y la vida,
las mejores palabras, 
y mirarse a los ojos no es sencillo. 

Y al final, Luis García Montero. O mejor al principio. Como siempre, al principio. He dudado tanto sobre quién sería protagonista en CAJÓN DE HISTORIAS. Quién tras Gabriel García Márquez, que dejó tanto hueco. Y al final, o al principio, Luis García Montero. ¡Qué grandísimo poeta! Escribir cualquier cualquier cosa, incluso escribir en prosa, resulta complicado cuando ya le has leído. Cuando ya le has sentido. Porque todo lo tuyo te suena ya gastado, incluso pobre, manido. ¿Qué decir aquí hoy? ¿Qué decir durante este mes de junio que comienza? ¿Volver a El jardín extranjero, que le valió el Premio Adonáis? ¿Regresar a las Habitaciones separadas que fueron Premio Nacional de Literatura en 1994? ¿Rebuscar en los recovecos de La intimidad de la serpiente, obra merecedora del Premio Nacional de la Crítica en 2003? Sí. Definitivamente, sí. Perderse en la poesía como entre las casetas de la Feria del Libro de Madrid, que este junio llenan la ciudad de letras. Mi ciudad. Perderse en los poemas para encontrarse con el arte de las palabras bien dichas, que resuenan en la caja torácica y la llenan de algo que no sé definir pero que es muy hermoso. Y descubrir, ya es hora, sus novelas. Tres. La primera, la última: Alguien dice tu nombre. Y seguir con las otras, con Mañana no será lo que Dios quiera, y traernos de paso a Ángel González, POETA. Qué vibrante rebeldía contra dios la de ese título. Y No me cuentes tu vida. Pues eso, ya lo saben, no hace falta que yo descubra nada ahora: Luis García Montero. Que también es marido y es amigo, de Almudena y de Joaquín. Que sí, la Grandes y el Sabina. Buah, cómo debe de ser una cena en su casa. Depende del día, anodina, seguro. Pero son la cultura y la esperanza, y la voz, y la vida también, porque todo va unido.  

Y al final, o mejor al principio, y para todo junio, Luis García Montero. "Rogamos hagan uso del cinturón, no fumen hasta que despeguemos, cuiden que estén derechos los respaldos, me tienes que llamar, de sus asientos". Life vest under your seat. El poeta. Él, poeta, protagonista.


Texto: Ismael Cruceta @CajondeHistoria
Fotografía tomada de su página web.