Las chicas de la 6ª planta es la película francesa que quería ver. Sabía que no sería una obra maestra, pero he conseguido entretenerme e incluso emocionarme con esas mujeres valientes que salieron de España en busca de un trabajo allá por los años 60. Esas mujeres de la época franquista que estaban hartas de la miseria de una España que no avanzaba y que sabían que en Francia, trabajando como limpiadoras, ganarían más de lo que aquí podrían soñar. Y ese dinero sería suficiente para dar forma a sus sueños, a una casa con bañera o, simplemente, a una vejez tranquila.
Soy consciente de que la película se desarrolla en lugares comunes y que no escasean los clichés. Pero realmente creo, y quiero creer, que esa alegría española se acerca a la realidad. Que ellas cantaban, que ellas bebían su vino español y que, aunque las condiciones no fueran fáciles, no se amilanaban ante nada.
La película es una comedia en la que no falta en sentimentalismo. Pero los franceses saben hacerlo muy bien para enganchar al espectador, y el director Philippe Le Guay se desenvuelve muy bien a la hora de contar una historia graciosa y entrañable al más puro estilo hollywoodiense en Criadas y señoras pero con acento español. Eso sí, hacía el final de la película el pastel se vuelve demasiado empalagoso y cuesta tragar, una lástima porque le hubiera puesto cuatro estrellas de no ser por el atolladero en el que se mete y del que le cuesta salir.
Con todo, la cinematografía francesa es el espejo en el que deberíamos mirarnos, lo he dicho ya anteriormente, lo digo y lo diré siempre. Y es que ese chovinismo de los franceses ensalzando su cultura y su cine es algo que me produce una profunda envidia. Un saber apreciar lo suyo como lo bueno -cuando lo es- hace que los resultados económicos sean mejores y las buenas ideas puedan llevarse a cabo. Nosotros les ganaremos al fútbol, pero ellos todavía nos siguen ganando en muchas otras cosas.
Con todo, la cinematografía francesa es el espejo en el que deberíamos mirarnos, lo he dicho ya anteriormente, lo digo y lo diré siempre. Y es que ese chovinismo de los franceses ensalzando su cultura y su cine es algo que me produce una profunda envidia. Un saber apreciar lo suyo como lo bueno -cuando lo es- hace que los resultados económicos sean mejores y las buenas ideas puedan llevarse a cabo. Nosotros les ganaremos al fútbol, pero ellos todavía nos siguen ganando en muchas otras cosas.
Las chicas de la 6ª planta es una película coral en la que destacan los papeles de Natalia Verbeke y Fabrice Luchini, pero en el que brillan más Berta Ojea, emocionándose con una llamada de teléfono para recibir la noticia de un nacimiento; una Carmen Maura que recibió el Premio César por su papel pequeño, un César que tiene pinta de ser más un reconocimiento a la trayectoria de la actriz; o una Lola Dueñas interpretando a una mujer comunista a la que el franquismo dejó sin familia.
Ellas, las actrices españolas, configuran el retrato de la alegría contra el desaliento, interpretando a una mujeres orgullosas de su identidad cultural en una España que, estando fuera, duele más, y a la que se aprende a querer de otra manera, sin dejarse contaminar por los símbolos y lo irracional, sino centrándose en su gente. En la gente trabajadora y alegre, en la gente culta y humilde, en la gente que nunca ha renunciado a la felicidad.
No puedo acabar esta crítica sin pediros algo que debería darse por supuesto: tenéis que ver esta película en versión original. En el doblaje se pierde parte de su sentido y de su esencia, del juego entre ambos idiomas. Viendo el trailer lo entenderéis perfectamente:
Os dejo también el vídeo de Carmen Maura recibiendo su Premio César, el galardón más importante del cine francés:
Pues me la apunto de todas todas!! Menuda pinta... Me gusta el cine francés, y el tema de la peli me atrae mucho, así que no tardaré en verla.
ResponderEliminarBesos!
Saramaga!! graciaaas!!! la verdad es que es una peli graciosa y entretenida, recuerda que son 3 estrellas y que hay mucho cliché para que no vayas con las expectativas demasiado altas, pero merece la pena, a mí al menos me mereció la pena. Bueno, también te reconozco que cualquier obra que se trate el tema de las migraciones me llega muy dentro.
Eliminarun besote!
Me gusta el cine francés pero dicen que a veces se pasa de azúcar, igual hay mucho cine de donde escoger del país galo, apunto la que mencionas, aunque me has asustado un poquito con lo de que se parece a the help. Veo a grandes artistas en el reparto, será buen motivo para agregarla a mi lista de búsquedas. Un abrazo.
ResponderEliminarEn esta hay mucho azúcar, sobre todo al final, simplemente creo que es bueno saber a que te vas a enfrentar porque el azúcar es necesario para el cuerpo, a veces.
Eliminardigamos que se parece a the help porque hay señoras y hay criadas. señoras menos buenas y criadas buenas, ya sabes. es una peli entretenida, creo que sin más pretensión que esa, y su objetivo lo consigue. las actrices españolas están maravillosas, y no lo digo porque las sienta mías, sino porque es verdad!!! jajaj
un abrazotee!!!
A mí también me encanta el cine francés. Esta peli la conocía, pero está bien conocer tu opinión y saber que te ha gustado.
ResponderEliminarBesos
Sí, me ha gustado, una peli bonita, merece la pena verla! besotes!
EliminarEsta ya la tenía echado el ojo, ya.
ResponderEliminarMenuda pintaza.
Besos
Anímate a verla antes de que la quiten!!! :) un besote!!!
EliminarLe eché el ojo en su momento pero luego la olvidé. Voy a apuntármela, que mi memoria me falla mucho. Y si puedo seguiré tu consejo y la veré en versión original.
ResponderEliminarBesotes!!!
Margari, me alegra muuucho habértela recordado!!!! sí, tienes que verla en versión original, esta es una de esas pelis que jamás deberían doblar!
Eliminarun besote!!!!
alguien sabe el nombre de la cancion que suena al final de la pelicula
ResponderEliminarhe encontrado esta página, hay parece que vienen todas las canciones: http://www.allobo.com/bo-les-femmes-du-6eme-etage-641.html
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