Tras prorrogar dos semanas su estancia en el Museo del Prado de Madrid, el próximo domingo finalizará definitivamente la exposición de "El Hermitage", y lo hace con un enorme éxito de asistencia. Puede que la gran acogida de esta exposición radique en la riqueza artística de las pinturas que la conforman, que va desde la pintura flamenca del siglo XVII hasta obras del siglo XX firmadas por Picasso o Kandinsky.
La bebedora de Absenta, de Picasso. |
Con El Hermitage en el Prado culmina la celebración del Año Dual España-Rusia 2011, que se inició con una exposición del museo madrileño en San Petersburgo, y que nos ha acercado ahora la ciudad rusa a España, dejándonos ávidos de conocerla más, de respirarla. Esta exposición es un recorrido no sólo por la Historia del Arte en Europa, sino también por el Imperio Ruso de los Zares, desde Pedro I Grande, fundador de San Petersburgo, o Catalina la Grande, impulsora del museo al instalarse en el Palacio de Invierno y adquirir numerosas obras de arte para su decoración, hasta Nicolas II, el último zar, asesinado tras triunfar la Revolución de 1917.
El Hermitage es un conjunto de edificios a orillas del río Neva que albergan el mencionado Palacio de Invierno, donde encontramos el Museo Nacional: una de las más completas pinacotecas del mundo. En este pequeño Hermitage que ha venido a Madrid, y que se despide ya de la capital española, podemos encontrar, entre otros, cuadros como el San Sebastián de Tiziano, que aúna la serenidad del renacimiento en la postura y la emoción y el sentimiento que habría de influir en generaciones de artistas posteriores en el trazo; El tañedor de laúd, de Caravaggio, así como a nuestros Diego Velázquez y El Greco.
Conversación, de Henri Matisse |
Dividida en dos plantas, es en la superior en la que nos acercamos al siglo XX y podemos contemplar la Composición VI de Kandinsky, un vivo ejemplo de la espiritualidad del arte, del caos y la violencia.
La misma sala alberga tres obras de Pablo Picasso, dos de ellas de su etapa azul -una es la mítica La bebedora de absenta- y otra de su época cubista. Vemos también en la sala El estanque de Montgeron, de Monet y Conversación, de Henri Matisse, uno de los más bellos ejemplos del fauvismo en el que predomina la intensidad del azul tan irreal, y en el vemos una conversación estática y muda entre un hombre y una mujer opuestos, él dominante y rectilíneo, ella sumisa y llena de recovecos y curvas. Una negación, un duelo sin palabras, pese al nombre del lienzo.
La misma sala alberga tres obras de Pablo Picasso, dos de ellas de su etapa azul -una es la mítica La bebedora de absenta- y otra de su época cubista. Vemos también en la sala El estanque de Montgeron, de Monet y Conversación, de Henri Matisse, uno de los más bellos ejemplos del fauvismo en el que predomina la intensidad del azul tan irreal, y en el vemos una conversación estática y muda entre un hombre y una mujer opuestos, él dominante y rectilíneo, ella sumisa y llena de recovecos y curvas. Una negación, un duelo sin palabras, pese al nombre del lienzo.
Pero esta exposición no es sólo pintura, sino que también incluye tesoros de orfebrería, joyería y escultura, como el modelo de terracota realizado por Bernini para su Éxtasis de Santa Teresa. Una pequeña joya.
En definitiva, una exposición que merece la pena ver, un legado artístico de inconmensurable valor. Un aperitivo que invita a viajar, cuanto antes, a Rusia. Sin duda, uno de los acontecimientos culturales del año.
Este sí fui a verlo en diciembre. Es verdad que las joyas entre otras cosas eran espectaculares. ¿Y qué me dices del cuadro todo azul, o todo blanco? ... (no me acuerdo ya del color utilizado)
ResponderEliminarA mí me gustó mucho la exposición. Del cuadro que dices no me acuerdo, jajaja, igual ni me di cuenta de que era un cuadro... :S
EliminarYo esta no he visitado. Confieso que no soy especialmente fa de pintura. En cualquier caso, te ha quedado genial la entrada, y me ha permitido descubrir un poco más sobre esta exposición tan emblemática.
ResponderEliminarMuchas graciass!!! A mï la pintura sï me gusta;no toda; por supuesto; pero estudië en el bachillerato historia del arte y durante la universidad algunas asignaturas como crïtica de arte o movimientos artïsticos contemporäneos
EliminarEs una pasada de exposición, a mí me gustó mucho cuando fui =)
ResponderEliminarBesotes
Yo he tenido la suerte de visitarlo y la verdad es que es totalmente recomendable!!
ResponderEliminarShorby, Marina Me alegra que os gustara!!! besotees!
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