La vida está hecha de rachas de alegrías y rachas de tristezas y largos años de calma, que son los mejores.
Segunda novela que leo de Héctor Abad Faciolnce, protagonista del mes en CAJÓN DE HISTORIAS.
La Oculta es un repaso por la Historia de Colombia a través de una familia: Los Ángel. Tres hermanos, Eva, Toño y Pilar narran sus vidas y sus recuerdos, y todo gira en torno a una finca familiar, La Oculta, cerca de Jericó, un pueblito del departamento de Antioquia.
Tres hermanos muy diferentes: Pilar, casada y con un montón de hijos, fiel y leal a su marido y al matrimonio como institución. Desde que nos casamos no nos hemos separado nunca, y hemos sido ricos y pobres, felices y desgraciados, normales casi siempre, pero hemos estado siempre juntos.
Su receta para la duración del matrimonio es muy sencilla, dice, y según ella se la dio la abuelita Miriam antes de casarse: "Mijita, a su marido dígale siempre que sí, no lo contradiga nunca, pero haga siempre lo que usted quiera".
Antonio, que emigró a los Estados Unidos y allí vive casado con otro hombre. Toño que siempre ha tenido incrustado en el corazón un pizca de nostalgia y vivió siempre con la ilusión de poder regresar a su finca.
Y Eva, que se casó varias veces, que siempre vivió como quise, y sus aciertos y sus errores siempre fueron suyos, solo suyos.
La Oculta es una novela familiar, de pequeñas anécdotas, de secretos y lazos de sangre, y de amor a la tierra, a Colombia y toda Latinoamérica. Un repaso por su Historia, manchada de sangre y cargada de esperanza.
Héctor Abad Faciolince, como en El olvido que seremos, tiene un estilo cercano y fácil de leer, que sienta bien y con el que consigue conectar con sus lectores.
En definitiva, una lectura en la que el ritmo varía, a veces tan emocionante y otras tan calmada, pero, sin duda alguna, es un buen libro que merece la pena leer, que reconforta.
Texto: Ismael Cruceta @CajondeHistoria
Me lo llevo apuntado, no lo conocía =)
ResponderEliminarBesotes
A mi me resultó justo eso, desigual, y empañó mis impresiones finales. Me quedé con la sensación de haberme perdido algo bueno en el camino
ResponderEliminarBesos