Los tiempos del odio es la tercera entrega de las novelas de Rosa Montero protagonizadas por la detective Bruna Husky. Y, lo adelanto ya, la mejor de las tres.
Tras Lágrimas en la lluvia y El peso del corazón, la escritora Rosa Montero, que en dos ocasiones ha sido protagonista del mes en CAJÓN DE HISTORIAS, regresa con una nueva novela de ciencia-ficción ambientada en un Madrid distópico en 2110, en el que la androide Bruna Husky se ve involucrada en una investigación trepidante para encontrar a Paul Lizard, quién es, además y de alguna manera, su pareja.
En Lágrimas en la lluvia, Montero logró fascinar al lector con la creación de ese futuro desalentador del próximo siglo, y en El peso del corazón le dio, precisamente, el peso que necesitaba el personaje de Husky para convertirse en uno de los más grandes personaje femeninos de la literatura del siglo XXI. En Los tiempos del odio consigue aunar ambas cosas: un argumento trepidante y sólido y un personaje cargado en matices, herido por la vida y angustiado por la muerte.
Rosa Montero, en su madurez creativa, alcanza cotas de calidad como nunca antes en su obra. Aborda, eso sí, los mismos temas de siempre: el miedo a la soledad y la muerte (como ya lo hiciera en La ridícula idea de no volver a verte o La carne) y la crítica al capitalismo feroz (que ya trató en Amado amo) -extensible aquí al fanatismo en todas sus formas.
Los tiempos del odio es una llamada de atención a la humanidad, un grito desesperado para frenar la sinrazón de los nacionalismos exacerbados y las brechas sociales (asusta leer cómo sus novelas futuristas se parecen cada vez más a la realidad, como si de un presagio negro se tratara). También estamos ante un alegato al amor, a la necesidad de amar y sentirse amado como motor y eje para la construcción de un mundo mejor en el que, como reza el subtítulo del libro, merece la pena vivir. Y con un poderoso final que es capaz de sobrecoger y hacer temblar al lector.
Bruna Husky, eterna y viva para siempre.
La frase:
"Yo creo que las guerras las ganan esas poblaciones que no se rinden. Que insisten en seguir manteniendo la cotidianidad frente al horror".
Texto: Ismael Cruceta @CajondeHistoria
Lágrimas en la lluvia me gustó mucho más de lo que esperaba, que no es un género que suela disfrutar. Y me dejas con ganas de leer ésta, pero antes tendré que leer la segunda.
ResponderEliminarBesotes!!!