Desde que el pasado mes de Noviembre se presentara mi segunda novela, La lágrima de la India, se han ido publicando en la web algunas reseñas o informaciones que me han ido llenando el cuerpo, poco a poco, de felicidad. Estoy muy contento, no os imagináis cuánto, por los comentarios que están llegando, por las palabras bonitas que están dedicando a los personajes, especialmente a Anita, que termina por llenar todo el espacio de alegría.
La novela está creciendo gracias a vosotros, a los lectores, a los bloggers. Hoy quiero dar especialmente las GRACIAS, con mayúsculas, a Natalia, la administradora de un blog maravilloso y de largo recorrido en la web que cuenta, entre redes sociales y el propio blog, con cerca de 8000 seguidores: Arte Literario.
Mi relación con este espacio web dedicado a la literatura viene de lejos y ya publicó una reseña de mi primera obra, Luz de libertad. Unas hermosas palabras que quise recoger y que aparecen en la solapa de La lágrima de la India.
En esta ocasión, Natalia ha mostrado su apoyo incondicional a mi proyecto literario y publicó una preciosa reseña en la que decía cosas tan bonitas como estas:
Pero esto no es todo porque, unos días después, Natalia publicaba un listado con sus diez autores indispensables, y ahí estaba mi nombre. Todavía hoy, mientras escribo esta entrada, se me ponen los pelos de punta al recordarlo, al saberme ahí. Es toda una responsabilidad, lo sé, pero también todo un orgullo.
Y, en tercer lugar, unas semanas después, se inauguraba en Arte literario una nueva sección llamada Jornadas de Novelas. He tenido el enorme honor de que La lágrima de la India inaugurara esta sección con una entrada que me dejó sin palabras, de verdad, sencillamente mágica. Porque Natalia explica su relación íntima con la historia, dónde la leyó, lo que le hizo sentir, y cómo se le ha quedado en los recuerdos por la gran sonrisa que formó en sus labios:
Como sabéis ahora estoy viviendo en Bolivia pero, cuando regrese a España, entre mis primeros planes está bajar al Sur a visitar a una gran amiga. Ojalá pueda coincidir también con Natalia y conocerla por fin en persona para darle las GRACIAS en vivo y en directo. Por el momento, desde aquí, quiero trasmitirle tanta gratitud y alegría que no cabe en esta entrada.
Mi relación con este espacio web dedicado a la literatura viene de lejos y ya publicó una reseña de mi primera obra, Luz de libertad. Unas hermosas palabras que quise recoger y que aparecen en la solapa de La lágrima de la India.
En esta ocasión, Natalia ha mostrado su apoyo incondicional a mi proyecto literario y publicó una preciosa reseña en la que decía cosas tan bonitas como estas:
La historia narra un viaje, no solo por tres países distintos, también por un océano de sentimientos que se te instalan dentro y que van apareciendo poco a poco. Leonardo y Soledad, Leonardo y Anita, Anita... todos ellos, en combinación, pero también en solitario, te van cautivando poco a poco con sus historias, con sus personalidades. No todos son perfectos, pero son humanos; no se les entiende en muchos aspectos (sobre todo a Soledad), pero se les aprecia por sus decisiones. Este viaje de sentimientos está repleto de decepciones, pero también de fuerza y valentía, porque todos siguen hacia adelante a pesar de su situación, y todos encuentran algo a lo que aferrarse. Tampoco puedo dejar de mencionar los tres países que Cruceta nos retrata en esta maravillosa historia: por un lado, está España, la ciudad de Madrid, que es donde vive Leonardo, una ciudad que el autor nos describe, y cuya situación política también se presenta (sobre todo al principio de la novela); por otro lado, Francia, represantada por la ciudad de Montpellier, la ciudad del cielo azul, como la describe Ismael, llena de estudiantes y de vida, la ciudad de Soledad; y, por último, todo el país de Sri Lanka, totalmente desconocido para mí, pero que he podido visitar gracias a la novela, gracias a las cartas de Anita, porque de él se describe todo: las costumbres, la situación política, la pobreza, los paisajes, la comida, las personas... todo. En cuanto a los personajes, estos son los que de verdad hacen que esta historia sea mágica, porque todos ellos son maravillosos.
Pero esto no es todo porque, unos días después, Natalia publicaba un listado con sus diez autores indispensables, y ahí estaba mi nombre. Todavía hoy, mientras escribo esta entrada, se me ponen los pelos de punta al recordarlo, al saberme ahí. Es toda una responsabilidad, lo sé, pero también todo un orgullo.
Y, en tercer lugar, unas semanas después, se inauguraba en Arte literario una nueva sección llamada Jornadas de Novelas. He tenido el enorme honor de que La lágrima de la India inaugurara esta sección con una entrada que me dejó sin palabras, de verdad, sencillamente mágica. Porque Natalia explica su relación íntima con la historia, dónde la leyó, lo que le hizo sentir, y cómo se le ha quedado en los recuerdos por la gran sonrisa que formó en sus labios:
La lágrima de la India cuenta una historia de amor, pero, sobre todo, también cuenta una de amistad. Yo soy de esas personas que nunca ven de más un romance en un libro, pero también es cierto que los hay tantos y de tantas formas que, muchas veces, una verdadera historia de amistad, o más bien, de AMISTAD en mayúsculas, es capaz de sacarme de dentro la sonrisa más sincera y un sentimiento de puro amor por los personajes. Eso es lo que ha conseguido Ismael Cruceta con su novela: conquistarme con una amistad y no con una relación de pareja, acariciar mi corazón con la historia de Anita Reina de Córdoba y su buen amigo.
Si hay algo que caracterice a este joven escritor es el sentimiento que pone en sus novelas. Siempre he dicho que Ismael sabe cómo transmitir con palabras bonitas, sabe cómo llegar al alma del lector, y lo hace con puro sentimiento, con palabras que te hacen sonreír y derramar lágrimas. Ismael ha conseguido con sus dos novelas transmitirme miles de sensaciones, hacerme llorar (y también de felicidad) y llenarme. Creo que eso es lo más importante en un autor, ¿no? La parte fea de esto es que sus novelas no son muy conocidas y que él es un autor más bien desconocido. Es por eso que mi primera entrada de esta sección se la dedico a él, porque creo firmemente en Ismael como autor (y como persona es un encanto) y porque siento que puede llegar lejos.
Como sabéis ahora estoy viviendo en Bolivia pero, cuando regrese a España, entre mis primeros planes está bajar al Sur a visitar a una gran amiga. Ojalá pueda coincidir también con Natalia y conocerla por fin en persona para darle las GRACIAS en vivo y en directo. Por el momento, desde aquí, quiero trasmitirle tanta gratitud y alegría que no cabe en esta entrada.
Buena página. Os dejo mi nuevo blog: http://todocinemaniacos.com.
ResponderEliminarGracias! saludos!!!
EliminarFelicidades a ti y a Natalia, ella se merece esta entrada y tú y La lágrima de la India os merecéis todas las buenas palabras, los buenos deseos y los éxitos. Un abrazo enorme.
ResponderEliminarMuchas gracias querida, estoy tan feliz!!! un besote!!!
EliminarWow, Ismael, muy buenas noticias, es más que normal que te encuentres así de satisfecho. Felicidades y un abrazo :)
ResponderEliminarMuchas gracias Yossi, estoy muy contento, es un regalo de muchísimo valor!!
Eliminarun abrazo!!
Felicidades, Ismael, por esta preciosa reseña y por todas estas bonitas palabras que te dedica Natalia.
ResponderEliminarUn besote
Muchas gracias Marga, estoy muy muy feliz! un besote!!!
EliminarOh, Ismael, esta vez soy yo la que se emociona. Muchísimas gracias, y no solo por esta entrada y por tus palabras, sino por ser el responsable de que escriba todo lo que he escrito de La lágrima de la India. Y sí, eres de mis autores obligados, porque he descubierto que tus letras me llenan, porque escribes con sentimiento, y a mí me encanta leer sobre los sentimientos humanos.
ResponderEliminarUn besazo.
Qué bonito Natalia, un abrazo desde Bolivia, sincero y gigante!! :)
EliminarIsmael, ¡me alegra saber que tu segunda novela sigue trazando su propio camino! Qué bien, debes sentirte muy orgulloso. Por cierto, ya tenía yo ganas de volver por tu espacio. ¡Espero que todo siga bien por Bolivia! Un abrazo enorme.
ResponderEliminarJesús, qué alegría verte por aquí de nuevo!!!!! por aquí todo genial!! un abrazo gigante!!!
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