Cena de amigos, de Danièle Thompson
El cuarto largometraje de Danièle Thompson es una película que intenta ser actual y no consigue más que ser ridícula, que intenta ser cómica y no hace gracia.
Un film en el que varios amigos (que no lo son) no hacen más que engañarse los unos a los otros, en un juego de romances patético y algunos puntos melodramáticos que no consiguen emocionar al espectador.
Ni tan siquiera el elenco de actores consiguen salvarla de la quema, a pesar de la galantería de Patrick Bruel, tan guapo como siempre, de la efectividad de Emmanuelle Seigner, que aquí está algo sosa, o de Dany Boon, un cómico con chispa que no consigue encender la llama. Absolutamente prescindible.
Esta película de terror, que cuenta el asedio que sufre, en su propia casa, un mujer a punto de dar a luz que había perdido a su marido en un accidente de coche, es un espectáculo grotesco, una carnicería de mal gusto y sin miramientos en los que la sangre corre a borbotones, los asesinatos son sin piedad y las escenas de mal gusto se suceden.
Desagradable y asquerosa, no repara en la mínima sensibilidad del espectador. Las películas de terror americanas quedan por los suelos, debido a la brutalidad de ésta, en la que no esperen ni un momento de descanso ni un final made in Hollywood.
Artificioso, con miles de errores de forma y de fondo, es una zancadilla en el cine francés de los últimos años que lo único que me ha provocado, y no es broma, son náuseas.
De dioses y hombres, de Xavier Beauvois
Ganadora del Gran Premio del Jurado en el Festival de Cannes, de tres premios César del cine francés, incluido el de Mejor Película, además de nominada al Bafta y alabada por críticos del mundo entero, la incluyo aquí porque una película que hace que me duerma a los veinte minutos, para mí, fracasa. Y digo más, si hago un segundo intento, empiezo a verla en el minuto veinte, donde me había dormido el día anterior, y en el cuarenta vuelvo a quedarme dormido... fracaso total.
Soy consciente de las buenas interpretaciones del grandísimo Lambert Wilson y del resto de los actores, no me cabe duda del mensaje certero que intenta transmitir, el de la tolerancia y la paciencia, pero chicos, está película ha podido con mi paciencia.
Siempre es bueno saberlo. La verdad es que no me llaman ninguna, así que a dejarlas pasar...
ResponderEliminarBesotes!!!
Pues me gustaron las tres. Cena de amigos es agradable, sin más. A l'interieur tiene mucho fans, pero para gore francés del bueno prefiero Martyrs o Frontière(s). De dioses y hombres tampoco tiene la entidad de 'peli de la temporada', pero su fotografía, actuaciones y mensaje es sobresaliente, incluso necesario.
ResponderEliminarEsta vez no hemos coincidido, :(
Espera a ver Micmacs o Una dulce mentira, más decepcionantes que estas 3.
Saludos!
De estas películas sólo he visto "À l'interieur (Inside)". Llegué a ella por casualidad, buscando alguna película de terror para pasar la tarde (soy aficionado a este género). Llevando a mis espaldas la versión original y los remakes de "La masacre de Texas", todas las entregas de "Saw" y otras tantas películas que tiñen la pantalla de rojo, ya te puedes imaginar cuál es mi opinión de esta película. A pesar de que me gustó el planteamiento y que disfruté con la historia, reconozco que en varias ocasiones tuve que parar para asimilar lo que podía encontrarme (sobre todo, con la escena final).
ResponderEliminar¡Un abrazo, Ismael! ¡Y feliz comienzo de semana!
Gracias por la advertencia. Con la cantidad de buenas pelis que hay mejor no perder tiempo. Un beso
ResponderEliminarDecía Gene Hackman, en su papel de Popeye, en aquella pelìcula de los 70 diriga por Arthur Penn ·Nights move· a propósito de una escena en el que uno de los protas estaba viendo una película de Eric Rhomer "Ah, es de esas que se ve crecer la yerba", metafora clara a lo aburrido que le parecía ( o un escondido homenaje de un estudioso como Penn hacia el cine Francés precisamente). Esto de dormirse en una película a mi me suele ocurrir en bastantes ocasiones, pero lo más importante es la predisposición a ver, me duele que metas la película de Beauvois entre las otras, pues yo la considero un muy buen trabajo, pero reconozco que si se te atraviesa, tendrás que dejarle un tiempo, desde luego la película, salvo algún subrayado, me parece una película ejemplar en todos los sentidos, sobre todo en ese camino interior que recorren los monjes al tomar decisiones drásticas y sú porqué.De lo mejor que he visto este año.
ResponderEliminarUn saludo
Roy
En un principio no me llama ninguna la atención, pero vistas tus opiniones voy a descartarlas por completo :)
ResponderEliminarBesos!
Margari, bien que haces... jajajaja
ResponderEliminarXavier, sabía que este post no te iba a gustar, jajaja, sobre todo porque sé que has defendido mucho De dioses y hombres. Soy consciente de que es una buena película, eso ya se aprecia desde la primera escena, con la calidad de su fotografía, pero de verdad, es que me dormí... dos veces!!! entiendes que no la recomiende, verdad???
Jesús, a mi À l'interieur me dejó mal cuerpo toda una tarde... jajajaja. Que brutalidad!!! no es mi género, definitivamente!! Feliz semana para ti también!! un abrazo!!!
ResponderEliminarOlga, jejeje, estas entradas suelen ser controvertidas, pero al fin y al cabo, son una advertencia para aquellos que, como tú, no quieren riesgos cinematográficos innecesarios!!
Roy, gracias por tu comentario y por tu aportación. Sé que soy un maldito, jajaja, meter a De dioses y hombres con las otras dos es un pecado, lo sé, una provocación, pero me dormí dos veces... Algún día, que esté muy despierto, volveré a verla desde el principio y le dedicaré una entrada para ella sola, y ojalá que sepa apreciar su calidad, porque estoy seguro que la tiene (no como otras películas que son malas, las mires por donde las mires...) y rectificar es de sabios, eso dicen... Espero que no te enfades mucho conmigo, jiji... un abrazote!!
ResponderEliminarKristineta! bien que haces!!! por cierto, luz de libertad va camino de tu ofi!! ;) besotes!!
¡Vaya! pues yo he oido buenas críticas de la película "De Dios y de hombres" y le tenía ganas ahora no sé.
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