SLUMDOG MILLIONAIRE, de Danny Boyle

Muchas cosas se han dicho ya de está película inglesa con aires de bollywood, triunfadora en la última edición de los premios Oscars. Entre ellas, que es "una de las mejores películas de la década" (según El cultural de El mundo). Es buena, sí, pero en esta década ha habido algunos PELÍCULONES con mayúsculas mejores que Slumdog millionaire (Million Dollar Baby es, para mí, lo mejor de estos últimos nueve años -parece que de millones va la cosa...-).

El film trata sobre Jamal Malik, un chico de los suburbios más pobres de La India, que se presenta a ¿Quieres ser millonario? con un único objetivo: que la chica a la que ama le vea por televisión, y a partir de sus respuestas, que va acertando una por una, el director Danny Boyle nos transporta a la infancia y adolescencia del muchacho, que consigue sobrevivir sin familia en uno de los países más caóticos del mundo.

Desde mi punto de vista, considero que Slumdog millionaire tiene cosas muy buenas. Quizá, la mejor sea el hecho de estar rodada en La India, con todas las dificultades que eso conlleva, y esto aporta frescura y color, alejando a los espectadores del gris que caracteriza a la mayoría de las películas de Hollywood. Pero también La India es miseria y violencia, algo que no le falta al film. Además, Boyle consigue que nos involucremos poco a poco con la historia, consigue aumentar la emoción de cero a cien, y este es uno de los hechos que la convierten, seguramente, en una gran película. Todo esto acompañado por la música más adecuada que podría haberse escogido, y un final apoteósico con Jai Ho, al más puro estilo Bollywood.

Boyle hace una película grande sin aires de grandeza, original. Y en estos tiempos en los que Hollywood parece estar de capa caída, la original se agradece, y mucho.